«El gobernador Rubén Rocha Moya es, obvio, el asesino intelectual», señala Juan Manuel Partida, presidente de la Asociación de Periodistas de Sinaloa. Agrega que ya está decidida la renuncia de Rocha
La semana pasada Partida Valdez escribió “La verdad de cómo fue que el gobierno mató a Melesio”, y seis días después su primicia quedó verificada en un comunicado de la fiscalía federal.
En su columna Altoparlante del 16 de agosto de 2024 escribió:
Aquí les revelamos la verdad de cómo fue que el gobierno mató a Héctor Melesio Cuén Ojeda.
Fue temprano, en el lugar donde fue privado de su libertad Ismael “El mayo” Zambada.
Como ya informé en un Altoparlante anterior, fue torturado intensamente, le pegaron cuatro balazos y murió desangrado.
A su acompañante, Fausto Ernesto Corrales Rodríguez, le permitieron recoger el cadáver ya por la noche.
Un encapuchado le dijo que debía irse de inmediato a la Clínica CEMSI.
Que advirtiera a la familia y que nadie hiciera mitotes ni ruido por el crimen.
La orden de que incineraran el cadáver surgió de los asesinos, no por acuerdo familiar.
Fausto recogió el cadáver del maestro.
Semidesnudo, con un golpe en la cabeza, las rodillas muy raspadas y varias heridas de bala.
Subió el cuerpo a la caja de la camioneta, y por eso la sangre en esa parte de la unidad.
Se fue directo a la clínica, sin pararse a echar gasolina como se aseguró falsamente desde el inicio y en el video que todos sabemos fue un burdo montaje hecho por el gobierno.
Al llegar a la clínica CEMSI, la enorme sorpresa de que ya estaban ahí la fiscal de justicia Sara Bruna Quiñónez y varias patrullas policíacas.
Le quitaron las llaves de la camioneta sin dejarlo entrar, y bajaron el cadáver de Héctor Melesio para meterlo al hospital.
¿Cómo fue que la fiscal se enteró de que Fausto Ernesto iba a la clínica?
Sólo hay una explicación: se lo informaron los asesinos materiales.
Un crimen cometido por el gobierno, para explicarnos mejor.
El gobernador Rubén Rocha Moya es, obvio, el asesino intelectual.
Una conclusión de sentido común, por el armado de la trama que terminó con el cadáver en la CEMSI.
Sara Bruna estuvo ahí, porque fue parte del crimen orquestado por su patrón Rocha.
El testigo Corrales Rodríguez debió informar de todo esto ante la fiscalía federal.
Decir la verdad, fue la recomendación de sus familiares más cercanos.
Por la memoria de Héctor Melesio y en exigencia de justicia.
A propósito del gobernador, se nos informa que su renuncia está decidida.
Quizá lo anuncie el día del “grito”, noche del 15 de septiembre, o al día siguiente.
Tiene que ser antes de que Claudia Sheinbaum asuma como presidenta de la república, fue la precisión.
Y en su columna de ayer escribió:
La FGR terminó de hundir a Sara Bruna y a Rubén Rocha
Por Juan Manuel Partida Valdez / Altoparlante / 22 de agosto de 2024
Vaya madrazo con el que la FGR terminó de hundir ayer a Sara Bruna Quiñónez y a Rubén Rocha Moya.
En un nuevo comunicado, se informa que Héctor Melesio Cuén Ojeda fue asesinado en el mismo lugar en el que secuestraron a Ismael “El mayo” Zambada.
Se reafirma que el video del asalto en la gasolinera fue un montaje.
Llegamos entonces a la confirmación plena de que la entonces fiscal Sara Bruna mintió con enorme descaro.
Y porque todos sabemos a quién estaba completamente subordinada, se hunde más al todavía gobernador Rocha Moya.
El viernes pasado nuestro Altoparlante llevó por título “La verdad de cómo fue que el gobierno mató a Melesio”, y nuestra primicia quedó verificada con el comunicado de la fiscalía federal.
Resumimos los puntos más importantes.
A Cuén Ojeda lo asesinaron temprano.
Su chofer tuvo acceso al cadáver ya por la noche, y un encapuchado le ordenó que se fuera de inmediato a la clínica CEMSI.
Instrucciones a la familia de que incineraran el cuerpo y que no hicieran ruido ni manifestaciones.
Con un detalle revelador: cuando el chofer llegó a la clínica, ya lo estaban esperando la fiscal Sara Bruna y varias patrullas policíacas.
Obviamente que a la señora Quiñónez le avisaron el gobernador o alguien más de los que participaron en el asesinato.
El gobierno de Sinaloa mató a Héctor Melesio, sin duda alguna.
Reafirmemos que la FGR no es independiente ni autónoma.
Sus comunicados sobre este caso llevaron el visto bueno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Son “se lo digo a Sara Bruna, para que lo entienda Rubén”.
Sería un descaro descomunal mantenerlo en el cargo, pero sabemos que son muy capaces.
EL CRIMINAL ABANDONO DE NUESTRAS ESCUELAS
Seguramente el apreciado lector ha escuchado la tan repetida cantaleta oficial de que en este gobierno si alcanzan los dineros porque las corrupciones son cosa del pasado.
Todos sabemos que son súper rateros y que muchos programas no operan por falta de presupuesto oficial.
Lo vemos en el sector educativo.
Acá en Sinaloa, como en todo el país, hay cientos de escuelas sin agua, sin luz, sin computadoras, sin aires acondicionados y en condiciones muy deplorables y hasta peligrosas.
El gobernador se la ha pasado anunciando que ya se hace esto y aquello, pero la verdad es que casi nada es lo que se arregla.
Las cuotas escolares antes tan repudiadas siguen siendo obligatorias en medio de atoles y dignidades fingidas por parte de las autoridades.
Los padres de familia tienen que aportar materiales para el mantenimiento y limpieza de las escuelas, que se incluyen en la “lista de útiles escolares”.
Estamos peor que nunca, y ni tantita pena les da presumirnos también en esto sus otros datos.
Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/altoparlante/.
.
Más historias
Octubre violento en varias partes de Sonora
¿Se ocultaba en Sonora ‘El Mayo’ Zambada?
Tren Sonora con el sello de la 4T: corrupción y destrucción