Desde hace siete meses Manuel Bartlett conocía la falta de condiciones de seguridad en la mina que ayer se inundó y atrapó a al menos siete trabajadores.
ROLANDO CHACÓN / AGENCIA REFORMA
COAHUILA, MÉXICO. – Desde hace siete meses, el director de la CFE, Manuel Bartlett, conocía la falta de condiciones de seguridad en la mina que ayer se inundó y atrapó a al menos siete trabajadores en el poblado Rancherías de este municipio de Coahuila, acusó ayer la Organización Familia Pasta de Conchos (OFPC).
Durante la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador y Bartlett a la mina Pasta de Conchos, en octubre del 2020, se le entregó al titular de la CFE una carta y fotografías para exhibir “cuevas” de extracción de carbón en el norte de Coahuila.
“Le entregamos una carta para pedir que nos recibiera para ver el tema de Pasta de Conchos y coadyuvar para evitar futuras tragedias en las minas”, narró Cristina Auberbach, representante de la OFPC.
La activista sostuvo que el director de la Comisión Federal de Electricidad tenía toda la información en sus manos.
“Le entregamos las fotos de estas minas, donde hoy sucedió esta tragedia, y Bartlett nunca nos contestó, ni nos recibió, le hicimos todo el trabajo. El muchacho que le denunció las minas está atrapado (ahora), ¡carajo!”, reprochó.
De acuerdo con las primeras versiones, trabajadores de la mina ACC habrían perforado al mediodía la pared de una explotación contigua, que estaba abandonada y llena de agua, lo que provocó una inundación general.
El Gobierno de Coahuila reportó como atrapados a Francisco Briseño y Leopoldo Méndez Flores, ambos de 24 años; Damián Robles Arias, de 27; Humberto Rodríguez Ríos, de 40; Gonzalo Cruz Marín, de 53, así como Pedro Ramírez y Mauricio Cortés, cuyas edades no se precisaron.
En la carta fechada el 23 de octubre de 2020, OFPC y el Centro Prodh de Derechos Humanos reportaron a Bartlett las denuncias de mineros de la Región Carbonífera de Coahuila, entre ellos de la mina ayer siniestrada.
“Con esta carta le entregamos unas fotos que tomamos el pasado lunes 12 de octubre en una de las ‘cuevas de arrastre’”, señala el texto entregado a Bartlett, “corresponden a dos empresas que han firmado contratos con CFE y extraen carbón sin cumplir las condiciones de seguridad e higiene”.
“No había agua potable para los trabajadores, andaban en tenis, sin equipo de seguridad”, añade. “No había consola para medir el gas, ni botiquín, ni extinguidores, ventiladores, autorescatadores, y los trabajadores no sabían si estaban afiliados al IMSS”.
En las fotografías entregadas, se aprecia una entrada inclinada y angosta, con vías férreas donde caben pequeños carros, la misma entrada donde ayer por la tarde se introdujeron mangueras para bombear agua afuera.
Según versiones, la explotación minera siniestrada ayer recibió en octubre del 2020 la visita de inspectores de la Secretaría del Trabajo federal y el dueño habría realizado ajustes que fueron validados el pasado 4 de marzo.
Fuentes del ramo identificaron al propietario de la mina como Eduardo Morales, pero no dieron más detalles.
La Región Carbonífera de Coahuila y las minas ligadas a la CFE tienen un largo historial de irregularidades y corrupción, que los trabajadores pagan con pésimas condiciones laborales. Incluso, grupos del crimen organizado, como los Zetas, han estado vinculadas a estas minas.
LOCALIZAN EL CUERPO DE UNO DE LOS SIETE TRABAJADORES ATRAPADOS
Esta mañana se ha localizado el cuerpo sin vida de uno de los siete trabajadores atrapados en la mina ubicada en el municipio de Múzquiz, Coahuila, así lo informó la Coordinación Nacional de Protección Civil del Gobierno de México.
La dependencia señaló que los equipos continúan trabajando ininterrumpidamente en las labores de búsqueda y rescate de los mineros restantes.
«Expresamos nuestro más sentido pésame a la familia del trabajador fallecido», se lee en un mensaje de la cuenta oficial de Twitter de la coordinación.
Más historias
OPINIÓN Nacional
OPINIÓN Nacional
OPINIÓN Nacional